Rutas Gastronómicas Castellón

Con unas materias primas excelentes, la gastronomía de Castellón se condensa en una buena oferta de restaurantes que ofrecen platos de lo más variados, con ingredientes a base de pescado y marisco fresco y productos de la huerta.

Existen gran variedad de elementos que dan un toque exclusivo a la cocina castellonense y alrededor de los cuales se organizan importantes encuentros. Es el caso de la trufa negra, que tiene sus propias Jornadas Gastronómicas anuales, cada mes de febrero, en colaboración con la Feria de la Trufa.

Pero no es la única estrella de la cocina de Castellón. La alcachofa es otra de las grandes protagonistas, en especial las famosas flores de Benicarló, que junto al dorado aceite de las olivas de la Sierra de Espadán, ofrecen una delicada combinación de sabores gourmet con Denominación de Origen.

Los amantes de las Ollas y el cuchareo tienen en Castellón su propio paraíso, donde disfrutar de todo tipo de combinaciones se convierte en una experiencia lúdica y muy sabrosa, gracias a platos como l’olla barrejada, con cordero y garbanzos; l’olla de recapte, con fresquísimas hortalizas y cecina de ternera; o la de cardets, con cardos y alubias.

Si andáis por el centro de la ciudad, tenéis que permitir que os seduzcan la enorme cantidad de pinchos y tapas de sus muchas y fantásticas tascas.

Castellón Music & Food

Los festivales Music&Food se han convertido en una apuesta original y cotidiana dentro de las propuestas turísticas y de ocio que ofrece la posibilidad de degustar platos señeros de la gastronomía castellonense y escuchar buena música en directo.

Hasta ahora Music&Food venía desarrollándose en primavera y verano, pero la respuesta del público ha permitido desarrollar ediciones especiales, como las del mes de febrero. Lo cierto es que el clima y la luz de Castellón permiten este tipo de actividades incluso en invierno.

Así Music&Food Art Edition, se ha hecho con la sede del Museu de Belles Arts de Castelló, en lugar de las instalaciones del Real Club Náutico, como suele ser habitual en verano. En esta ocasión, los visitantes pueden disfrutar de la magia de su cocina, música en directo de bandas pop-rock, visitar las exposiciones del museo y comprar artesanía en el mercadillo.

Arroz señoret, arroz de sepia con alcachofas o fideuá de ajos tiernos y chipirones son algunas de las tentadoras delicias que se pueden catar en este morning show que marida a la perfección la música, el arte y la gastronomía de la ciudad.

Los organizadores están tan contentos que ya buscan nuevas localizaciones para complacer a los muchos seguidores de este evento.

Castellón de Tasca en Tasca

Es uno de los grandes alicientes de esta ciudad de la Comunidad Valenciana. Las tascas del centro histórico de Castellón abren el apetito al más pintado. Sus extensas barras atiborradas de pinchos y tapas de todo tipo son una tentación para el picoteo popular y esa costumbre tan española de disfrutar de la vida con los amigos, unos vinitos o unas cañas y unas buenas tapas.

Todo gira alrededor de unas cuatro calles principales que se ponen a rebosar hasta la bandera, locales de tasqueo donde se come y se bebe de pié y es la antesala para seguir la marcha un poco más tarde, por la noche, en locales de copas.

Locales de toda la vida, como la Tasca La Guindilla o El Mejillón, conviven con apuestas vanguardistas y novedosas y, entre todos, consiguen un toque peculiar y muy auténtico en el que cada uno personaliza sus productos para el arte del tapeo.

Precisamente en El Mejillón se sirve algo tan típico como la zurra, una bebida de fabricación artesanal que elaboran ellos mismos, a base de vino y cava y con producción diaria limitada, así que hay que darse prisa porque los vasitos se agotan en seguida.

Revueltos de hortalizas en La Tasketa, pinchos de mariscos en La Nécora, ibéricos en la Tasca Ernesto, sashimi en el Mercat de les Tapes, magníficos vinos en La Sucursal… Sólo hay que comerse Castellón de tasca en tasca.